jueves, 24 de julio de 2014

EL AMOR ¿UN IMPOSIBLE?




El amor en pareja puede llegar a ser una gran fuente de satisfacción y de energía para la persona, pero en muchas ocasiones, lejos de dar lugar al bienestar y a la construcción de una vida satisfactoria para ambos, se convierte en un auténtico campo de batalla o da lugar a la desidia, la monotonía y a un gran vacío en los miembros de la pareja. En la desilusión, el aburrimiento, los conflictos continuos, el silencio, los problemas con la familia, la falta de deseo, la infidelidad, los celos, los trastornos sexuales... se perfilan momentos en los que se puede llegar a pensar en abandonar la relación... o no. Aunque parezca paradójico, el ser humano tolera más la frustración que el goce y puede llegar a convertirse en una forma de vida que, aunque produce insatisfacción aparentemente, inconscientemente hay una tendencia y cierto goce a ello. Es un signo de madurez el buscar ayuda cuando uno da cuenta que no puede solo y el amor, después de la fase del enamoramiento, en la cual se podría hablar de un momento “mágico” en el que se idealiza a la otra persona, todo parece maravilloso, cae. La desilusión es necesaria para la producción del amor, que es un trabajo que hay que realizar. Nada está hecho en el ser humano, todo se produce y una pareja es la suma del amor, del deseo, de los pactos y del compromiso. Cada uno partimos de modelos familiares, ideológicos que se nos transmiten (ej los roles de hombre y mujer, la teoría de la media naranja que proviene del mito de Aristófanes, de Platón, un amor trágico como el de Romeo y Julieta...) y si no se hubiera escrito sobre el amor no existiría, nos llegan a decir los poetas. Antes eran ellos los que nos mostraban con sus letras y su visión las artes amatorias. No es hasta la llegada del psicoanálisis que el amor tiene una mirada científica. Odio que esconde amor, falta de deseo hacia la persona amada y en cambio deseo hacia quien no ama, sentimientos contradictorios... Uno no comprende lo que le pasa, es como un sueño contado, parece absurdo, sin sentido, no se corresponde la razón con lo que uno puede llegar a sentir, o hacer...actos fallidos, lapsus, donde uno se descubre ante el otro porque cuando no se habla, no se pone en palabras, se actúa.
Si nos sumergimos en el amor llenos de prejuicios, conseguiremos bañarnos en un mar de dudas (esto siempre se ha hecho así, es lo normal, no lo ves, mi familia siempre ha sido así...) En ocasiones la moral cierra esa puerta o cuestiones con el amor y el deseo que son tan paradójicas y a veces tan ajenas que sorprenden a los amantes. Hay una parte muy desconocida en nosotros, una parte inconsciente que habla de nuestros deseos y que nos llevan a vivir una vida que no queremos e incluso a utilizar una enfermedad para hablar de algo que no podemos poner en palabras y lo escenificamos en el cuerpo, en esa sintomatología sexual, en esos conflictos constantes, que no dejan de ser un síntoma, un disfraz de lo que realmente se encuentra en juego. Sólo después de la escucha psicoanalítica, de esa interpretación necesaria para descifrar todo el entramado es que sus problemas de pareja podrán ser otra cosa. Se lo diré más claro, hay algo en usted, que habla más de uno mismo y no es hasta que podemos pronunciar en voz alta que no sabemos cómo se ha llegado a esa situación, qué pensamientos le llevan a vivir de una manera que no quiere y de cómo se mantiene. Dos actores en el mismo escenario donde el guión, con la terapia de pareja, está por construir, tú eliges.

Laura López psicóloga-psicoanalista
Telf: 610865355
www.psicoanalistaenmalaga.com